Juzgará con justicia a los débiles,y sentenciará con
rectitud a los pobres de la tierra. Herirá al hombre
cruel con la vara de su boca, con el soplo de sus
labios matará al malvado..." Isaías, 11: 4
Desde el año 2015, hemos abogado para que la deuda de Puerto Rico sea reestructurada de modo tal que, incida en la disminución de medidas de austeridad, reduzca los niveles de pobreza entre los niños y las niñas de la isla y a su vez cree un crecimiento económico sustentable. En conjunto, con congregaciones religiosas hermanas de EE.UU., Puerto Rico y Jubilee USA, hemos reiteradamente hecho este llamado a nuestro gobierno, la Junta de Supervisión Fiscal de Puerto Rico y el gobierno de EE.UU.
Antes de los huracanes Irma y María, los planes fiscales proponían recortes en los pagos por concepto de la deuda, mayores a un 80% del monto adeudado.
Estamos sumamente sorprendidos, por los acuerdos negociados entre la Junta de Supervisión Fiscal y algunos tenedores de bonos, que representan recortes menores a los anteriores. Antes de los huracanes, luchábamos con el hecho de que cerca de un 60% de nuestros niños y niñas vivían bajo niveles de pobreza. Luego de los huracanes, aún permanece una gran angustia a través de todo Puerto Rico. No obstante, vemos como ahora se llegan a acuerdos que son más onerososa los que originalmente se habían propuesto, antes de los huracanes.
Nosotros estamos firmemente opuestos al acuerdo negociado de la deuda de COFINA. Estamos preocupados por las acciones de nuestro gobierno, los tenedores de bonos y la Junta de Supervisión Fiscal. Nuestra gente, especialmente nuestros niños y niñas, quienes heredarán esta deuda de cara al futuro, merecen mejores acuerdos.
No menos importante, el acuerdo actual de COFINA, está fundado sobre proyecciones a corto plazo sumamente optimistas y sobre estimadas. Si se llegan a acuerdos similares con otros grupos de tenedores, bonos como los de las Obligaciones Generales, nuestros asesores de Jubilee USA nos indican que, nos veremos obligados a reestructurar, nuevamente, la deuda de Puerto Rico al cabo de pocos años.
Las negociaciones actuales con los tenedores de bonos han fallado, al no tomar en consideración la pobreza infantil, reducir las medidas de austeridad y garantizar un crecimiento económico sustentable.
El recién aprobado plan fiscal proyecta sobrantes en el presupuesto estimado. Para nosotros es moralmente inaceptable que, nuestro gobierno y la Junta de Supervisión Fiscal, mientras trabajan en un plan de ajuste fiscal, utilicen los sobrantes del presupuesto, para pagar la deuda de Puerto Rico. El plan de ajuste debe utilizar los sobrantes para la recuperación del huracán, reducir la tasa de pobreza infantil, limitar las medidas de austeridad y estimular el crecimiento económico del país a largo plazo.
Si el gobierno de Puerto Rico y la Junta de Supervisión Fiscal no pueden llegar a un acuerdo sobre la deuda, que contenga recortes significativos en el monto adeudado, de modo que ubique a Puerto Rico en una ruta de crecimiento económico sustentable; les pedimos el favor de echarse a un lado y le abran paso al proceso de quiebras aprobado por el Congreso en el año 2016, para eliminar la carga inmoral que ejerce esta deuda sobre nuestro pueblo, en particular sobre el futuro de nuestros niños y niñas.
Mons. Roberto O. González Nieves OFM
Metropolitan Archbishop of the Roman Catholic Archdiocese of San Juan de Puerto Rico
Reverend Heriberto Martínez Rivera
General Secretary
The Bible Society of Puerto Rico
Coordinator
Ecumenical and Interfaith Coalition of Puerto Rico